En casa nos encantan, porque están buenísimas y porque puedo preparar una raciópn muy grande para dividir en dos y congelar.
*12-16 albóndigas.
*Guisantes congelados finos.
*Bolsa de mezcla de setas
*un bote de pisto.
*un bote de tomate frito.
*aceite de girasol
*Agua, sal, pimienta molida y pastilla de caldo de pollo.
Pasos a seguir:
Fríe las albóndigas en una puchera onda. Cuando estén doradas sácalas del aceite, espolvorea con pimienta molida y reserva.
En el mismo aceite, añade la cebolla cortada pequeña, los guisantes y la mezcla de setas. Sofríe todo junto.
Ahora, añade un bote de pisto preparado, otro de tomate frito, un vaso de agua y una pastilla de caldo de pollo.
Mezcla todo bien e incorpora las albóndigas que reservaste ya doraditas.
Baja el fuego a suave y cocina hasta que los guisantes estén listos.
Sírvelo acompañado de puré de patata.
¿Fácil verdad? Buen provecho Am@s de Casa.